Visitas

contador de visitas wordpress

Suscribite

martes, 29 de julio de 2025

La injusticia de nunca recibir

Espero recibir, de vez en cuando, cosas de los demás; caricias, gestos, abrazos, regalos y hasta un poco de amor. 

La INjUstíCiA de nunca recibir

¿Es injusticia realmente esperar algo que creo que merezco?

¿Estoy autorizada a plantear y replantear mis deseos y necesidades ante un otro?

Parece haber un poco de oscuridad sobre el asunto del deseo y la exigencia.

Se nos dice: “no podés pretender que el otro satisfaga nada tuyo”, y que no podemos vivir en completa soledad. Se nos dice que tenemos que comunicar nuestros deseos y necesidades; y a la vez que nos estamos proyectando y que no podemos llenar de expectativas la interacción que un otro. Un otro que muchas veces apenas conocemos.

Yo creo que es injusto. Desde el punto de vista del deseante, no acceder a aquello que anhelo. Desde el punto de vista del deseado, es violento.

La trama personal

Leí ayer, en otra plataforma, un texto sobre la hermana mayor, muy fuerte, por si acaso. Muy de esos que tocan el hueso y la fibra exacta de tu ser y tu sentir. Me sentí completamente identificada y un poco al caso viene este tema. Yo uso mucha de la bronca y la injusticia que cargo como hermana mayor para dar rienda suelta y soltarme a escribir. Es de la misma injusticia que yo escribo lo que me pasa y el propio dilema moral que atravieso. ¿Tengo derecho a pedir? ¿O siempre estaré condenada a ceder? ¿Es esto una elección moral que elijo hacer, para ser la hija buena? ¿O, en cambio, puedo cambiar mi manera de entenderme y actuar?

Le robé el espejo a mi hermana, que a su vez ella le robó a mi mamá. Se lo confesé a mi mamá. Mi hermana está de viaje en este momento. Me dice: “Ella me lo robó a mí, devolvéselo, no quiero tener problemas cuando vuelva”. ¡¿Qué?! Así como leíste. Después, otra es que le compran todo y le dan todo, ¡y a mí me sacan y me sacan lo poco y nada que tengo! Además de que me tratan cruelmente y nunca reparan en mí o en mis emociones y necesidades.

Ya es para otra historia y no me quiero poner en modo víctima porque soy hermana mayor y aprendí a no priorizarme nunca. Aprendí a recibir toda la carga del clan sobre mi espalda y hoy tengo escoliosis y los discos hechos mierda. 

Me reventó de la bronca que mi mamá se haya tenido que comprar un celular nuevo porque se rompió el de ella y mi hermana ya se lo cambió por el de ella. O sea, celu nuevo gratis, a veces admiro la forma en la que consigue las cosas. 

La otra cara de la luna

Ahora la estoy esperando llegar del viaje. Para abrirle la puerta. Estoy pendiente al teléfono. Al final: le devolví todo. No me sale ser de otra manera. Lo aproveché mientras duró.

Ahora estoy más cambiada. Soy otra. Espero poder conseguir yo misma todo lo que a ella le dan. Creo que puedo. Me cuesta una banda, a veces, materializarme a mí misma en la adultez, en la autosuficiencia y el éxito profesional. Es como si una parte de mí que nunca tuvo el lugar para ser niña, hoy en día, no me deja florecer en este cuerpo de mujer. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu voz importa. Compartí tus reflexiones y perspectivas sobre esta entrada. Te leo con atención.

Mapa para navegar por las aguas de Capu Doble

Instrucciónes para Surfers de Capu Doble De: La Escuela de Surf, Bloggeados ¡Hola, surfer! Si has llegado a esta orilla, es para tomar una d...