No creo que todo lo que hayamos pasado haya sido en vano, o una mentira. Me niego a creer que todo fue un engaño; que la conexión no existió. Todo lo contrario: siento y estoy segura que la conexión fue real.
Creo que por eso me duele tanto que... ¿? No sé, sí supiera lo qué realmente pasó...
Capaz te aburriste el jueves, como me pasó a mí.
Pero creo que en realidad se metió un tercero, como siempre (me) pasa.
Ella se tuvo que meter, y el jueves en la noche o el viernes en la mañana decirte algo. Decirte alguna mentira de que yo había dicho algo malo sobre tí.
Aunque me queda la duda, estoy casi segura que fue ella.
Me dió la libertad de quitarte del medio; de robarte. Me dió el regalo de sacarme alguien de encima, alguien tan caballeroso, tan amable y apuesto; pero que se iría muy rápido, a la primera que tambaleara el bote.
Hoy estoy triste pero estoy agradecida.
De saber que yo no te hice daño, aún así yo siempre salgo herida. También gano experiencia, pero no me alcanza.
Nada alcanza a apagar el ardor confuso que deja la desaparición.
Y la bronca quema, de saber que a alguien más le salió bien el plan y la maldad.
"¿Qué hubiera sido sí...?" Elijo no preguntarme. Elijo confiar en que los que están son los reales y los que se borran no hacían mucha falta 🖤.
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